Tras el inconveniente de la otra semana, retomo el tema del que les iba a hablar. Extrañamente, era una de las pocas veces que tenía ganas de hablar de un tema de relativa actualidad y justo se me dio tener que escribirlo un mes después. Como les comentaba, justo estoy cambiando de trabajo y me olvide de dejarles acá seteado el Out Of Office (en realidad me negué a setearlo, que es algo muy distinto). El trabajo va bien y ya vamos a charlar más sobre el proceso de duelo tan negado hoy que vamos saltando de promesa de realización en promesa de realización, sea en un trabajo, en mudarse a otro país o en la idealización de un compañero de vida.
Como les comento siempre en este espacio, este proyecto funciona para mí como una experimentación sobre la fuerza motriz necesaria para crear cosas y para reconocer las dificultades que atravesamos mientras lo hacemos. Como una versión muy literal de “el medio es el mensaje” de Marshall McLuhan, este espacio no trata sobre el contenido ni sobre la forma, sino un poco sobre ambas pero sobre todo trata la misma acción de estar haciendo. Aquel que diga “qué fácil escribir sin un tema!”, solo va a revelar su desconocimiento de la historia de hablar al aire.
Resumen de hoy
Condiciones de producción
El arte sí existe
Condiciones de producción
💋 Sex Work is (Gig) Work - Benjamin Weil
Este artículo lo leí el otro día fuera de contexto. Plantea algo que vemos en varios espacios que es cómo actualmente no hay una relación muy directa entre clase social y ocupación en sentido estricto presentando la complejidad del contexto de esto en un ejemplo muy concreto: el trabajo sexual en plataformas.
Creo que la proliferación de las plataformas de este tipo, los bots de twitter llamando a consumirlas, todo nos habla de un clima de época y esta lectura da un contexto amplio del asunto del trabajo sexual en redes. Me queda personalmente el mensaje de que realmente no hay una unidad de clases en el trabajo sexual virtual, donde se entremezcla el morbo exhibicionista de algunas personas con trabajos bien pagos, la curiosidad creativa de otros y la necesidad económica de algunos.
🏁 Casiopea - Casiopea (1979)
Este es un disco del cual sé poco y nada del contexto, ni siquiera puedo recomendar canciones en particular porque los nombres están en japonés. Lo conozco no sé por qué motivo y sonaron algunos temas del mismo que están en mi playlist más amplia (soy muy fan de las playlists y de juntarme a charlar, esta playlist la defino como música que se disfruta escuchar pero no distrae (nada más terrible que poner música que querés cantar en una juntada)) mientras volvía con unos amigos de Mar del Plata, momento donde me di cuenta de que es algo muy bello y digno de recomendar.
Es como un jazz j-popero melódico, absolutamente increíble y con mucha potencia. Recomiendo escuchar el disco entero porque creo que efectivamente te puede fanatizar, pero para entretener una noche el primer y cuarto tema son fáciles de compartir en grupos.
El arte sí existe
Para empezar quiero aclarar que no tengo nada en contra de Moldavsky, no consumo Luzu ni otros programas de streaming en este momento de mi vida. No por nada particular, creo que más que nada la inversión de tiempo tiene que ser mucha en una sentada y hoy consumo más formatos que me permiten fragmentar la experiencia. Entiendo también para empezar que Eial quiso decir que el Arte con aquella A mayúscula no existe, ese arte idealizado en un pedestal, pero lo dijo en términos tan amplios y genéricos que realmente me tuvo toda aquella primera semana antes de perder el archivo (hace ya tanto tiempo!) pensando en eso. Pensando con bronca, aclaro.
¿Por qué digo esto? Porque es claro que venir a enunciar que el arte no existe siendo un nepo baby del ámbito cultural es algo absolutamente lógico con respecto a tu posición en la cadena productiva. Todos hacemos discurso autobiográfico y el arte no es más que eso enuncia una persona cuyo ingreso proviene de expresar públicamente lo que quiera. No es tan así, pero un poco es así.
Y quiero decir que no me parece mal que sea un nepo baby. Para quienes no lo saben, así es como los chicos no tan jóvenes le decimos a quienes logran tener éxito en un campo determinado debido a ser hijos de personas con relaciones en determinados campos. Creo que hay muchos roles donde esto puede traer ventajas comparativas, como diría David Ricardo. Por ejemplo si uno es hijo de un crítico cultural, embajador o rol del tipo y crece rodeado de un contexto culturalmente rico y diverso, es muy posible que tenga más facilidad en generar contenido valioso sobre estos temas, incluso contenido invaluable como testigo privilegiado de ciertas épocas. Siempre puede resultar uno un inútil, obviamente, pero el caso contrario también se da.
A lo que voy es que la mayoría de las personas vivimos ejecutando un rol preconcebido para el cual debemos alienarnos de nuestra individualidad. Nuestro rol nos preexiste, comporta tareas parametrizadas y un grado mayor o menor de reemplazabilidad. Esto supone que nuestra experiencia gran parte del tiempo no sea la experiencia genuina, la exposición a nuestra verdad ontológica, afectiva, sensible o como queramos decirle. Y nuestro relato en muchísimos casos está muy lejos de ser autobiográfico. En algunos casos logramos hacer lo que amamos y enseñar nuestra perspectiva ayudando a otros en nuestro trabajo y logramos hacer de nuestra vida y experiencia personal un recurso a comunicar, y esto se celebra, se disfruta y todo eso. Pero en muchísimos casos la experiencia alienada es fácil de contraponer con la movilización estética, sea por la creación personal o por el consumo.
¿Cuántas historias conocemos de personas que a través de libros, películas o series logran permitirse sensibilizarse con lo que fue una vivencia personal que en el momento en que la vivieron no tuvieron más posibilidad que reprimirla y continuar con la lucha diaria? Así como es evidente para Eial que el Arte con esa A mayúscula tan elevada no existe, es evidente para mí que el arte existe y la veo en aquello que él no puede experimentar: el trabajo alienado, la sensibilidad reprimida, el lado opuesto que confirma su existencia.
Es un tema para ampliar muchísimo más, pero como les decía, cambie de trabajo hace una semana y el período de luto fue inmediatamente arrollado por la ansiedad de aprender quién se espera que uno sea en un espacio nuevo. El tiempo que tengo hoy es insuficiente, no quería igualmente cortar una semana más el contacto. Me interesa mucho escuchar, en cambio, sus comentarios al respecto, siempre considero que podría estar equivocado y malinterpretando o llevando al extremo las palabras, y tal vez me pueden ayudar a llegar a la meditación en profundidad que no me puedo dar hoy. Les dejo el botón para hacerlo:
Y con eso ya los dejo hasta la próxima semana.
Un abrazo,
Feli
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